En los meses de reclusión en la Prisión Provincial de Málaga hasta su fusilamiento, Antonio (El Chófer), un conductor de taxi de adscripción anarquista escribió de forma clandestina un Libro de Poemas con 67 páginas, pidiendo como última voluntad en una carta de despedida, que se publicasen esos poemas. Ese Libro de Poemas estuvo oculto durante décadas en el fondo de un armario en casa de unos familiares. Sus páginas liberadas son un vehículo de reflexión, pero hay más. Ni buscado desde el punto de vista cinematográfico hubiéramos encontrado el motor de esa escritura en prisión: una historia de amor. Todo está escrito para alguien, una mujer llamada María Roa Jiménez. La Historia, está en sus versos.